En la actualidad, las empresas se enfrentan a múltiples desafíos relacionados con la gestión de talento y la estrategia empresarial. La globalización, la digitalización y la creciente competencia son solo algunos de los factores que han transformado el mercado laboral y la forma en que las empresas deben abordar la gestión de su talento. En este contexto, cada vez es más evidente que la estrategia de talento es la estrategia de la empresa.

En primer lugar, es importante entender que el talento es el activo más valioso de cualquier empresa. No importa cuán innovadora sea una empresa, cuán avanzada sea su tecnología o cuán fuerte sea su presencia en el mercado, sin el talento adecuado, ninguna organización puede tener éxito a largo plazo. Por lo tanto, es vital que las empresas comprendan la importancia de atraer, retener y desarrollar a los mejores talentos para su organización.

Para lograr esto, es necesario que la estrategia de talento esté integrada en la estrategia de la empresa. Las empresas deben tener un enfoque estratégico para la gestión de talento que esté alineado con los objetivos de negocio. Esto significa que el talento debe ser un componente integral de la estrategia de la empresa, y no solo un complemento o una idea secundaria.

Para asegurarse de lograrlo, las empresas deben asignar recursos y prioridades a la gestión de talento. El equipo de gestión del talento, liderado por el “chief human resources officer – CHRO), debe ser parte vital en el comité de dirección para tomar decisiones y estar involucrado en la planificación estratégica de la empresa. Esto permitirá, sin lugar a dudas, que la estrategia de talento sea un componente imprescindible de la estrategia y garantizará que las decisiones estratégicas se tomen con el talento adecuado en mente.

Les dejo tres recomendaciones importantes que los CHRO y el grupo de personas que pertenecen al área de gestión de talento pueden seguir para desbloquear el valor de su estrategia de talento y ofrecer planes de juego de talento alineados con la estrategia de negocio:

  1. Alinear la estrategia de talento con los objetivos de negocio: La estrategia de talento de una organización debe estar estrechamente alineada con los objetivos de la empresa. Los líderes de gestión de talento deben comprender las necesidades de personal de la organización y cómo esas necesidades pueden cumplirse a través de la selección, la formación y el desarrollo. Además, deben trabajar en estrecha colaboración con los líderes del negocio para identificar las habilidades y competencias necesarias para alcanzar los objetivos.
  2. Establecer métricas de talento claras y acordes a la nueva economía: Olvidemos esas métricas enfocadas a medir horas de trabajo, rotación o conocimientos. Las organizaciones deben medir y evaluar su éxito a través del impacto y valor generado por parte del talento. Estableciendo métricas de talento claras y de acuerdo con los tiempos de cambio e incertidumbre, derivadas del cambio en los comportamientos de las personas y de las nuevas tecnologías, para que midan el verdadero éxito de la organización en el desempeño de los empleados. Además, estas métricas deben estar estrechamente alineadas con los objetivos para evidenciar que el talento esté respaldando el crecimiento y el éxito de la organización.
  3. Cerrar la brecha del talento digital: Con el aumento de la automatización y la transformación digital, las organizaciones deben cerrar la brecha de habilidades digitales para mantenerse competitivas en el mercado. Los CHRO deben trabajar en estrecha colaboración con los líderes de negocio para identificar las “smart skills” necesarias para mantenerse vigentes y generando valor en el mundo digital.  El área de Gestión de Talento debe garantizar que las personas adquieran las habilidades digitales necesarias para apoyar el crecimiento de la organización en esta era digital.

En conclusión, para desbloquear el valor de la estrategia de talento, las empresas deben aprovechar la experiencia y la perspectiva del CHRO y liderazgo del talento organización.