El pensamiento lineal ha sido la forma dominante de pensamiento en la sociedad durante varias décadas, y nos ha hecho quedarnos atrapados en el statu quo. Las industrias, empresas e instituciones modernas se han arraigado tanto en sus formas tradicionales de hacer las cosas que han perdido por completo de vista lo obsoletas que se han vuelto. El pensamiento lineal también ha frenado el progreso social y nos ha llevado por un camino insostenible. Hemos construido nuestra sociedad de una manera que solo beneficia a unos pocos seleccionados, y hemos desperdiciado muchos de los recursos de nuestro planeta en el proceso.

¿Por qué todavía estamos atrapados con el pensamiento lineal?

La desafortunada verdad es que las personas tienden a acostumbrarse a su forma de hacer las cosas. Es la naturaleza humana quedar atrapado en una zona de confort y seguir haciendo las cosas de la manera en que siempre se han hecho. Es por eso por lo que todavía estamos atrapados en el pensamiento lineal, a pesar de que hay innumerables ejemplos de sus limitaciones.

El pensamiento lineal es una zona de confort que se ha reforzado a lo largo de muchos años. Es una visión del mundo que se ha arraigado profundamente en nuestra psique, y es extremadamente difícil salir de ella. Si no estamos tratando activamente de desafiarlo, es probable que sigamos siendo prisioneros de esta visión del mundo. Incluso si tratamos activamente de escapar de las limitaciones del pensamiento lineal, es posible que no tengamos éxito. Es extremadamente difícil romper con una forma de pensar que se ha reforzado profundamente durante un largo período de tiempo. Cambiar la visión del mundo es un proceso que puede llevar años, incluso décadas.

El pensamiento lineal tiene 3 facetas

  1. Preguntas limitantes

Los pensadores lineales hacen preguntas muy limitantes que conducen a respuestas muy limitantes. Hacen preguntas como: ¿Cómo podemos aumentar las ganancias? o ¿Cómo podemos reducir los costos? en lugar de: ¿Podemos cambiar completamente nuestro modelo de negocio?

2. Planificación rígida

Los planificadores lineales crean estrategias a largo plazo que son completamente inflexibles. Crean planes de negocios a 5 o 10 años que asumen que nada cambiará en el mundo durante ese tiempo y que son totalmente inadaptables a las nuevas circunstancias.

3. Motivación extrínseca

Los gerentes lineales utilizan la motivación extrínseca para impulsar a las personas. Ofrecen recompensas como aumentos salariales y promociones para alentar a las personas a alcanzar sus objetivos, y utilizan métodos como congelamiento en el puesto o despidos para castigar a las personas que no cumplen con sus expectativas.

Cómo superar las limitaciones del pensamiento lineal

El primer paso para cambiar nuestra forma de pensar es tomar conciencia de cómo vemos el mundo.

Afortunadamente, el entintado lineal es extremadamente fácil de detectar una vez que lo estamos buscando. Todo lo que tenemos que hacer es prestar atención a las preguntas que hacemos y a la forma en que planificamos nuestro día. Si notamos que estamos haciendo preguntas muy limitantes o si estamos planeando nuestro día de una manera rígida, entonces probablemente estemos atrapados en una forma lineal de pensar. Una vez que hayamos identificado el pensamiento lineal, podemos comenzar a desafiarlo y liberarse de sus limitaciones. Aquí hay algunas sugerencias sobre cómo podemos hacer esto:

  • Hagamos mejores preguntas

Hagámonos preguntas abiertas que desafíen por completo el statu quo.

En lugar de preguntar: ¿Cómo podemos aumentar las ganancias? preguntemos: ¿Cómo pueden las personas beneficiarse de nuestro producto o servicio de una manera completamente nueva?

  • Crear un plan estratégico flexible

Crear un plan estratégico flexibleque tenga en cuenta los rápidos cambios que están sucediendo en el entorno. Crear un plan ágil que no tenga un período de tiempo predeterminado y que se pueda adaptar fácilmente a las circunstancias cambiantes.

  • Usemos la motivación intrínseca

Usemos la motivación intrínseca para impulsar a las personas. En lugar de ofrecer recompensas y castigos extrínsecos, concentrémonos en crear una cultura de aprendizaje y crecimiento donde las personas se sientan apasionadas por su trabajo

Conclusión

La forma lineal de pensar con frecuencia nos atrapa pensando que solo hay una o dos formas de resolver un problema. Es un enfoque reduccionista que divide un problema en partes más pequeñas para resolverlo. La forma lineal de pensar, aunque útil en algunas situaciones, puede llevarnos a perder muchas oportunidades.

Ahora que sabemos qué es el pensamiento lineal y cómo puede limitar nuestro pensamiento, es hora de abandonar esta forma obsoleta de pensar. Abramos nuestra mente a nuevas ideas, seamos flexibles y busquemos nuevas oportunidades que podríamos haber perdido antes. Nunca se sabe, es posible que encontremos una nueva forma de hacer las cosas que es mucho mejor que el statu quo.