El liderazgo es mucho más que frías habilidades. Los rasgos y principios de liderazgo son importantes con seguridad, pero deben emplearse con corazón y pasión genuinos para ser más efectivos.

Ten en cuenta de que los dos rasgos que las personas mirarán primero cuando te juzguen como líder son tu “actitud” y tu “aptitud”.

Actitud para que puedan conocer la calidad de tus intenciones hacia ellos.

Aptitud para que puedan juzgar si realmente puedes cumplir esas intenciones.

Alberga actitud y aptitud y ellos lo percibirán, sabrán que eres un líder que vale la pena seguir.

Demuestra…

Empatía: Mantén siempre los pies en los zapatos de las personas que te siguen para saber hacia qué dirección se dirigen.

Emoción: Desencadena contagio emocional, especialmente en las personas que te siguen.

Humildad: Para quienes te rodean, debes ser el mismo.  Aprende que no eres mejor que las personas que te siguen.

Aprecio: Analiza a los mejores líderes que has tenido en la vida y dime que no tenían un trasfondo palpable de afecto por los demás a través de sus acciones.

 Como líder las personas adoptarán gran parte de lo que eres. Entonces, proyéctalo con pasión, porque las habilidades sin corazón no te llevarán muy lejos.